Child Online Protection Bureau

Centro de Control de la Unidad 105 de la Policía de Israel

La Policía de Israel solicitó a SPF el diseño especial de las consolas técnicas para su nuevo Centro de Control de la Unidad 105, la Oficina de Protección Infantil en Línea.

Para el nuevo centro denominado Unidad Policial 105, el equipo técnico de la Policía solicitó a SPF modificaciones integrales de la consola ELITE para satisfacer sus requisitos técnicos, funcionales y ergonómicos. Cada consola para 2 operadores dispone de racks centrales de 14U desde los cuales se distribuye todo el cableado procedente del suelo técnico elevado a lo largo de la consola. Además, las consolas están equipadas con brazos ergonómicos especiales de alta resistencia para 2 monitores curvos de 49″ por operador. Finalmente, para proporcionar privacidad y reducción de ruido en la sala, las consolas también están equipadas con paneles laterales y traseros “insonorizados”.

El resultado es una sala con 20 operadores distribuidos en 5 filas, con un suelo técnico elevado escalonado para cada fila.

Simultáneamente, este centro cuenta con otra sala de control adyacente con 7 operadores, para atender otros tipos de emergencias. En esta sala también se suministran consolas de la serie ELITE con características similares a las de la sala principal.

La unidad policial 105 es una unidad operativa encargada de investigar delitos en línea contra menores y hacer cumplir la ley en el ciberespacio. La unidad forma parte de Lahav 433, que se ocupa de delitos graves a nivel nacional e internacional.

La unidad 105 utiliza numerosos medios de aplicación de la ley, tanto tecnológicos como de otra índole, para investigar, exponer y llevar ante la justicia a los delincuentes que operan en el ciberespacio. Paralelamente, la unidad emplea medios alternativos de aplicación para reducir la actividad ilícita en línea. La unidad coopera con agencias internacionales de aplicación de la ley y policiales para hacer frente a la naturaleza global del ciberdelito.

La unidad está integrada por profesionales cualificados especializados en la aplicación de la ley en el ámbito del ciberdelito. A ellos se suman profesionales de la educación, la sanidad y el bienestar social.